LA BATALLA DE MADRID
- Nicomedes Febres
* No voy a hablar ni de las guerras anteriores ni de la toma de Madrid por el ejército franquista que pudo haberla tomado mucho antes pero no lo hizo para prolongar la guerra civil y exterminar a los republicanos en el resto de España fusilando a miles cada día, porque eso era menos visible. No. Voy a hablar de la Batalla de Madrid que escenificará el presidente Guaidó mañana sábado 25 de enero en la Puerta del Sol a las 6 pm cuando convocó a los venezolanos para hablar con ellos y con los españoles, al negarse a recibirlo el chulito de pedro sánchez como lo recibió el inglés Boris Johnson, la primer ministra Angela Merkel de Alemania o el presidente francés Emanuel Macron en el palacio del Eliseo, y allí, junto al árbol de madroño y el oso, que son los símbolos de la capital en Puerta del Sol le darán las llaves de la ciudad. Plenar la plaza es responsabilidad de los venezolanos residentes allí y de los españoles que quieren evitar otra tragedia como la nuestra allá, en mi adorada Madrid de mis querencias. Llenarle la plaza hasta la bandera debe ser la meta, porque hasta la bandera debe ser la protesta contra maduro y su banda, pero también contra el chulete y su banda de podemos.
Los españoles que aman a Venezuela, que detestan a la tiranía y aman la libertad también son convocados y bienvenidos en esta nueva Batalla de Madrid, que alineará a sánchez, ya sin careta con la tiranía y contra Venezuela. Nuestra victoria allá es ahora también la derrota de sánchez y de los delincuentes de podemos, quienes son dueños de la franquicia chavista en la madre patria.
Esfuércense en una convocatoria monumental hasta la bandera, llenando hasta preciados y la calle del Carmen al norte, y toda la calle de Alcalá hasta el este y Antón Martín al sur. El éxito de esa convocatoria es el testimonio de su solidaridad con nuestro esfuerzo, con la libertad de los presos políticos y el regreso de Venezuela a la democracia. Sé que es un reto inmenso, que es un sueño, pero siempre los sueños deben ser más grandes que la realidad para que sean sueños, pero así siempre se construyen las grandes epopeyas de la Hispanidad. Manos a la obra. Viva la madre patria y que la Democracia vuelva a Venezuela comenzando por Madrid.
* Adelanto esta columna de mañana para dar tiempo a la convocatoria y agradezco a todos si la comparten para que llegue al último rincón del mundo.
